El teletrabajo desde casa está cada vez más presente en nuestro país, de manera que es muy importante que lo organicemos todo para diseñar un entorno que sea agradable y que nos ayude a mejorar la eficiencia, así que hemos preparado una serie de consejos para acondicionar una oficina en tu hogar que te permitirán pensar en cada detalle para crear un lugar de trabajo con menos estrés y mucho más accesible.
ENCUENTRA UN ESCRITORIO FUNCIONAL Y ACCESIBLE
Lo primero y más importante que debes estudiar para acondicionar una oficina en tu hogar es tu lugar de trabajo, y para ello necesitarás un escritorio de buena calidad, resistente, bonito y agradable al tacto, que además deberá contar con todo lo necesario para satisfacer tus necesidades laborales. No escatimes en el tamaño de la mesa, porque una mesa grande nos permitirá disponer de un espacio al margen del teclado para escribir o leer, así como espacios para dejar nuestros utensilios, planificador o calendario.
El estilo del escritorio es algo muy personal, ya que fundamentalmente va a gustos, pero recuerda que puede ser interesante optar por un modelo que te permita que en todo momento tengas accesibles las herramientas de trabajo que utilices con más frecuencia a lo largo del día.
LA SILLA, UNO DE LOS IMPRESCINDIBLES PARA ACONDICIONAR UNA OFICINA EN TU HOGAR
La silla es uno de los muebles más importantes de toda tu oficina, ya que es el lugar donde vas a pasar sentado horas y horas, por lo que debe tener una buena calidad y por supuesto también ser ergonómica, garantizando una buena higiene postural a lo largo de toda la jornada.
Es mejor optar por sillas que tengan una buena transpiración, muy especialmente si estás en una zona de temperaturas elevadas, y por supuesto también es ideal que se pueda regular en inclinación y altura, que tenga pendiente negativa. Es importante que nuestros pies se apoyen en el suelo y no queden colgando para favorecer el flujo sanguíneo. Los reposabrazos, reposacabezas, cojines lumbares y cojines cervicales son elementos también muy recomendables para prevenir dolencias y mejorar la comodidad, pero no necesarios para todos los usuarios.
ESTUDIA BIEN LA ILUMINACIÓN Y OTORGA PRIORIDAD A LA LUZ NATURAL
La iluminación va a ser esencial, y para ello te recomendamos que priorices la luz natural, pero que la combines con focos de luz artificial de tonalidad fría, aquella superior a 6500 lúmenes, que es la luz recomendada para mantenernos activos y con mayor atención. La luz natural no sólo es más agradable, sino que también es mucho más saludable, pero como no podemos disponer de ella durante toda la jornada, es importante que instales sistemas de iluminación que estén bien adaptados a tus necesidades diarias.
En este sentido, lo que prima es que tu escritorio esté bien iluminado, para lo cual puedes utilizar flexos y lámparas con brazos extensibles que aporten una iluminación más focalizada, así como un plafón para el resto de la estancia.
Recuerda que en las ventanas es interesante instalar estores, ya que son prácticos y te ayudan a regular la entrada de luz natural, evitando el sol directo que puede dañar los muebles o crear reflejos en los monitores.
ELIGE LOS COLORES IDEALES PARA PAREDES Y TECHOS
Quizás sea el momento perfecto para repintar el techo y las paredes, y en este sentido tienes que intentar combinarlos para conseguir un entorno despierto y agradable.
Recuerda que los colores oscuros crear sensación de cercanía y los claros alejan, de manera que si por ejemplo quieres crear la sensación de que el techo está más alto, pinta las paredes de colores más oscuros que el techo, mientras que si quieres alargar el espacio, la pared del fondo deberá ser más clara.
Además, ten en cuenta la psicología del color y su capacidad para crear distintos estados de ánimo: por ejemplo el color amarillo transmite optimismo, y el blanco contribuye a la atención a la vez que refleja la luz.
